Problema Razón Fe en la Filosofía Medieval

Tema 7: El Problema Razón – Fe en la Filosofía Medieval

El problema de la razón y la fe es uno de los temas más importantes en la filosofía medieval. Durante esta época, los filósofos y teólogos se esforzaron por comprender cómo la razón y la fe interactúan entre sí y cómo ambas pueden ser combinadas de manera coherente. La mayoría de los pensadores medievales creían que la razón y la fe complementan una a la otra y que la verdad se encuentra en la revelación divina, pero también en la investigación racional. Sin embargo, también hubo debates sobre hasta qué punto la razón puede llegar a conocer la verdad y hasta qué punto la fe debe ser aceptada sin cuestionar.

Durante la Edad Media, hubo un problema central en relación a la relación entre la filosofía y la fe, que se conoce como el problema de la relación entre la razón y la revelación. En ese periodo, la Iglesia Católica tenía una posición dominante en la sociedad y controlaba la educación y la cultura. La Iglesia afirmaba que la verdad última se revelaba a través de la Biblia y la tradición y que la razón solo podía ser utilizada para comprender mejor la fe. Esta postura de la Iglesia presentaba un conflicto con la creciente filosofía escolástica, que buscaba utilizar la razón y la lógica para explorar y comprender el mundo y la fe. Algunos filósofos escolásticos, como Santo Tomás de Aquino, intentaron reconciliar la razón y la fe, argumentando que la razón podía ayudar a comprender mejor la fe y que la fe era necesaria para complementar las limitaciones de la razón.

Sin embargo, hubo tensiones entre los filósofos escolásticos y la Iglesia en relación a la libertad de pensamiento y la autonomía de la razón. Algunos filósofos, como Pedro Abelardo, cuestionaron algunas de las doctrinas de la Iglesia y fueron condenados por herejía. Además, la Iglesia mantuvo su postura de que la verdad última solo podía ser alcanzada a través de la fe y la revelación divina, lo que limitó el alcance de la filosofía y la exploración independiente del mundo. En resumen, el problema en la Edad Media fue la tensión entre la filosofía y la fe, y cómo reconciliar la razón y la revelación. Mientras que algunos filósofos escolásticos intentaron reconciliar ambas, la Iglesia mantuvo una postura que limitaba la autonomía de la razón y la exploración independiente del mundo.

Con el inicio de la era medieval, cambia todo, la cultura, la sociedad, se cae el Imperio Romano de occidente. También cambian las preocupaciones filosóficas. El cristianismo domina en Europa y aparecen personas de la talla de San Agustín de Hipona para unir y a la vez separar la razón y la fe. Estos sacerdotes llegan a decir que la razón y la fe son compatibles y complementarias, aunque no todos están de acuerdo. Para ellos, son dos vías de conocimiento, dos caras de la misma moneda para llegar al mismo objetivo, la aclaración de la verdad cristiana. Tomás de Aquino es conocido por una afirmación, «entender para creer y creer para entender». Con esto podemos resumir la relación entre la filosofía en el medievo y el cristianismo.

La filosofía lo engloba todo en esa época, la física, la química, la teología, las matemáticas. En definitiva, todas las disciplinas académicas se encuentran dentro de ella. Aunque no es hasta la revolución científica que la ciencia se separa de la filosofía, la religión sí que lo hace. Puesto que como menciono más arriba la razón y la fe, se pueden complementar, pero no pueden ser lo mismo. Son sacerdotes los que inician esta discusión entre la razón y la fe. Como son San Agustín de Hipona, San Anselmo de Canterbury, Santo Tomás de Aquino y Guillermo de Ockham entre otros.

En la filosofía, la fe se refiere a la creencia en algo sin pruebas o evidencias concluyentes. Esta creencia puede ser religiosa, espiritual o no relacionada con ninguna creencia religiosa específica. La filosofía ha tratado de comprender la naturaleza de la fe y su relación con la razón y la evidencia. Algunos filósofos argumentan que la fe es incompatible con la razón y la evidencia, mientras que otros argumentan que la fe puede complementar y enriquecer la razón y la evidencia. También existen filósofos que defienden una visión intermedia, según la cual la fe puede ser racional, pero solo en ciertas condiciones. En general, la fe ha sido un tema controversial en la filosofía y ha sido objeto de debates y discusiones a lo largo de la historia. Aunque no existe una solución única y universal a la cuestión de la fe en la filosofía, continúa siendo un tema de gran importancia y relevancia en la actualidad.